¿Qué es el tiempo? Realmente no lo sé. Mis profesores de física tuvieron serios problemas para definírmelo y a veces creo que confundían los efectos por las causas. Pero al margen del tiempo físico matemático existe el tiempo biológico y subjetivo con el que todos tratamos día a  día.
Ahora que ando buscando diferencias entre el mundo presencial y biológico con el mundo digital mi pregunta es, cambia el  tiempo subjetivo con el que estábamos acostumbrados a relacionarnos con el tiempo digital cuando nos movemos en el mundo virtual, redes sociales, blogs, albúmenes digitales, recuerdos en youtube, etc … ¿Qué diferencias hay?
La primera diferencia es que al igual que en la vida real el tiempo físico matemático no es tan importante. Guardamos los recuerdos asociados a emociones con independencias del tiempo real.  Busco mis fotos de cuando fui a Cuba, por los recuerdos que llevan aparejados, pero realmente nunca sé en qué año fue, en el noventa y tantos. Sin embargo las nuevas fotos digitales vienen todas no sólo con la fecha en la que fueron tomadas sino también con el lugar donde se tomaron. (Por ejemplo si la hiciste con un móvil que tenga el GPS activado), e incluso ya pueden reconocer ciertas caras de quienes aparecen en las fotos. (Como sucede con picasa) Pero aun no tenemos la facilidad de agruparlas emocionalmente para construir nuestra memoria autobiográfica. (Menos mal porque así puedo seguir estudiando el tema). Bueno esta es una diferencia evidente entre ambos mundos pero creo que a poco todos somos conscientes de ella, aunque la gran mayoría de la gente sigue empeñada en catalogar las fotos digitales por años.
Pero que el tiempo físico es totalmente distinto del subjetivo es más que evidente y no hace falta recurrir nuestra memoria biográfica. Por ejemplo el tiempo subjetivo que pasé mientras me operaban de miopía con laser no tiene nada que ver con el tiempo físico real. Y es que nuestro reloj interno se acelera y varía la percepción de la duración de los hechos, así el tiempo percibido depende de las condiciones fisiológicas, del estado psicológico y del emocional. Por lo general mientras más grata es la tarea menos atención prestamos al tiempo y así este transcurre de manera más rápida. Quizá sea este el motivo por el que nos enganchamos a las redes sociales, los juegos en red, y a multitud de tareas digitales, porque nos gustan, de ahí el éxito que tienen, y porque en ellas el tiempo no pasa.
En el mundo biológico es tremendamente importante la llamada comunicación no verbal, de la que adolece hasta ahora el mundo digital, y estos signos distorsionan nuestro tiempo subjetivo. Por ejemplo existe el experimento de mostrar rostros con distintas expresiones faciales y luego indagar acerca de la duración con la que se han visto estas caras. Pues resulta que aquellas fotos que reflejaban ira o temor tienden a acelerar nuestro reloj interno ante una posible amenaza y por ende los sujetos del experimento tendían a pensar que la duración de estas imágenes era mayor. 
Pero es más, los humanos al empatizar podemos llegar a compartir nuestro reloj interno y así variar la velocidad de nuestro modo de comunicarnos. Así la madre suele hablar más lentamente a su hijo, o cuando un joven se encuentra con su anciano abuelo también tiende a ralentizar sus acciones. Claro que para empatizar de esta manera necesitamos en gran parte de los casos ver las distintas variaciones de la expresión de nuestro interlocutor, algo muy alejado de la realidad digital actual. ¿Estas diferencias son importantes? Supongo que sí, de hecho me dan ganas de cambiar las imágenes de presentación que tengo en las distintas redes sociales en las que estoy.
Y mientras sigo indagando intento organizar mejor mis recuerdos digitales porque en cualquier momento sentiré nostalgia de ellos y me gustará poder rememorar estos recuerdos. (Disfrutar del pasado es vivir dos veces, Marcus Valerius Martialis) y todos sentimos y sentiremos nostalgia y la verdad es que poder guardar digitalmente nuestros recuerdos puede tener ventajas futuras.